AGUAYMANTO - ORIGEN Y USOS

guaymanto (Physalis Peruviana) es una fruta exótica envuelto en doradas hojas que al ser despojada de su capullo se nos presenta ante nosotros una pequeña cereza de color amarillo / naranja e impregnado de una brillantez y fragancia envidiable. Es nativa de las tierras altas del Perú y considerado como “Oro de los Incas “

El aguaymanto contienen una amplia selección de vitaminas (A, C, B1, B2, B6 y B12), fibra, pectina, minerales (fósforo y hierro), proteínas e hidratos de carbono. Como resultado de su composición nutricional, Aguaymanto tiene una variedad de propiedades para la salud naturales y se cree que es útil en ciertas condiciones médicas.

Para el proceso del Aguaymanto deshidratado, la fruta es cosechada en un punto óptimo de maduración luego es seleccionado. La fruta se somete a un proceso de deshidratado moderado con el fin de preservar sus propiedades nutricionales y cualidades.

El Aguaymanto Deshidratado es un snack saludable para ser consumida en cualquier momento y que le da un toque especial a sus comidas y postres favoritosa, además de contener una amplia selección de vitaminas.

Ingredientes: Fruta deshidratada 100% natural, sin aditivos ni persevantesa

Cajamarca Principal Exportador de Aguaymanto Deshidratado

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Porqué deshidratar el Aguaymanto? La técnica de deshidratación es un método muy antiguo de preservación de alimentos. La historia nos revela que en culturas como la Egipcia, China y la propia cultura Inca, ya se deshidrataban los frutos al sol para conservarlos durante el invierno. 
La ventaja de la deshidratación es que las frutas logran preservar así la mayoría de sus propiedades nutricionales.
En la actualidad, la técnica de deshidratación cumple un papel fundamental en la región andina como una excelente alternativa para los agricultores pobres, ya que el almacenamiento del producto es menos complicado y la cantidad de merma es mucho menor. Hay estudios que comprueban que en las regiones tropicales y subtropicales la cantidad de productos agrícolas dañados desde la cosecha hasta su venta en el mercado, alcanza hasta un 70%, mientras que en la Unión Europea, por ejemplo, esta cifra es de solamente 5 %.